Nuestra forma de consumir y de ver la vida está cambiando. Cada vez son más las personas que se suman a un estilo de vida saludable, que se preocupan por el medio ambiente y por cómo van dejar el planeta para las generaciones futuras. 

Si en el último artículo hablamos sobre el aumento del consumo de las bebidas vegetales y sus principales beneficios, hoy queremos centrarnos en la importancia de que la producción de sea local, sostenible y ecológica.

La forma en que la humanidad produce y consume tiene un gran impacto en el medio ambiente: erosión del suelo, desforestación de los bosques y, abuso de químicos, entre otros. 

Todos nuestros actos tienen una consecuencia en nuestro planeta y si bien cambiar nuestro estilo de vida a uno más saludable es un gran paso, el siguiente paso debería ser preocuparnos de la sostenibilidad en la producción de esos productos  y el respeto con el medio ambiente y con las personas que participan en ese proceso.

En BaseMill éramos y somos muy conscientes de todo esto, por eso cuando decidimos llevar a cabo nuestro sueño no solo pensamos en el producto final que íbamos a ofreceros, sino también que nuestro cultivo y producción del mismo cumpliera con todos los valores que defendemos en cuanto a estilo de vida saludable, respeto por el medio ambiente y una producción de principio a fin ecológica y respetuosa con todos los miembros de la cadena, desde la elección de los ingredientes hasta el envase final que os llega a casa.

Cultivo y producción sostenible y local: 

El objetivo final de llevar a cabo un cultivo sostenible es optimizar la producción al mismo tiempo que se reduce el impacto medioambiental, asegurando el futuro de la tierra que se trabaja y de todos los recursos naturales.

El resultado, ingredientes de la máxima calidad con certificado ecológico, como los nuestros.

Si al cultivo sostenible le sumamos una producción artesanal y local tendremos como resultado una economía ética, cercana y próspera para todos los integrantes de la cadena.

Y no solo eso, apostar por una producción local también se traduce en una reducción en las emisiones de CO2 de los vehículos de transporte. 

Conservación medioambiental:

Otro principio básico del cultivo sostenible es llevar a cabo acciones que además de proteger y conservar el medio ambiente, mejoren la tierra cultivada. 

Pero la conservación medioambiental no acaba en el cultivo y producción. Son necesarias otras actividades que protejan nuestro planeta por ello apostamos por envases y embalajes reusables y con serigrafía (sin etiquetas).

Con esto conseguimos un doble objetivo: reducir el uso de plásticos en los envases y embalajes de nuestros productos y de papel y tintas para las etiquetas.

Uno de nuestros principios es dejar el planeta mejor de lo que nos lo encontramos, por eso la producción de nuestros productos es tan importante para nosotros como el producto que os ofrecemos.

Si tú como nosotros quieres vivir en paz con el medio ambiente, al mismo tiempo que cuidas tu alimentación ¡este es tu sitio!. Creemos en los alimentos tal y como se obtienen de la naturaleza y en cuidar lo que nos rodea, incluidos vosotros.Accede a nuestra página web para conocer en detalle nuestras bebidas vegetales a base de almendra ecológica.